Espacio de poesía y cuento (Obra en progreso)

viernes, 30 de septiembre de 2011

Renacimientos

Renazco cada día;
regreso sorprendida
de la muerte nocturna cotidiana,
           del ensayo de muerte,
    de revueltas historias en retazos, 
                      metáforas de la vigilia.

Renazco a veces
con los grilletes de terrores nocturnos
pesadillas, sueños confusos
y me incorporo al día
con pesadez
como Lázaro con mortaja
con el dolor de volver hecho pedazos
con la sangre molida
      y la carne cayéndose
                                podrida.

Hay días que renazco sonriente
desde esa muerte dulce
donde cierro los ojos
y emprendo viajes venturosos
        me enamoro
                          soy amada
donde armo un escenario
                       y todo es propicio
y cada uno de los personaje que elaboro
me habla con dulzura:
             ahí, donde siempre soy joven,
                     hermosa y con talento.

Y renazco
           -¡qué alivio!-
la mayor parte del tiempo
             con la sonrisa franca
y el canto de jilguero
           por el hecho simple
               el simple hecho
             de volver una vez más
                      a este ensayo
de sueño en la vigilia.

jueves, 22 de septiembre de 2011

Tenzin Gyatso, XIV Dalai Lama


"Mi religión es la bondad." Dalai Lama

“No crean nada por el simple hecho de que muchos lo creen o finjan que lo creen; créanlo después de someterlo al dictamen de la razón y a la voz de la conciencia”: Sidarta Gautama, el buda histórico.

*El XIV Dalai Lama, Tenzin Gyatso, es el líder espiritual del pueblo tibetano. Nació el 6 de julio de 1935 en el seno de una familia campesina, en la aldea de Takster, al noroeste del Tíbet. A la edad de dos años, el lino llamado Lamo Dondup fue reconocido como la encarnación del XIII Dalai Lama, Tubten Gyatso.

Dalai Lama es un título de origen mongol que significa "Océano de Sabiduría" y comunica la importancia que a este personaje confieren la tradición y cultura tibetana, la cual ve en Su Santidad a la emanación del buda de la compasión infinita -Avalokiteshvara en lengua sánscrita- o Chenresig, ojos amorosos, en la lengua tibetana.

Su Santidad inició sus estudios monásticos a los seis años. A los 25 completó el doctorado en Estudios Budistas, recibiendo el grado de Gueshe Larampa, el más alto honor académico de la tradición budista del Tíbet.

Tras el comienzo de la invasión china del territorio histórico del Tíbet en 1949, el Dalai Lama fue tempranamente llamado a asumir su plena responsabilidad política como jefe del estado tibetano. Aunque en los años subsecuentes intentó establecer pláticas con Mao Tse Tung y otros líderes chinos con el objetivo de propiciar la mejoría en la difícil situación del Tíbet, en 1959 -tras la brutal represión, por parte de las tropas chinas, del levantamiento nacional tibetano en Lhasa- El Dalai Lama se vio obligado a escapar del Tibet y exiliarse en Darámsala, India, desde donde estableció y dirigió, hasta hace unos meses, el Gobierno Tibetano en el Exilio.

Desde entonces, el Dalai Lama ha solicitado el apoyo de la comunidad internacional, trabajando incesantemente para lograr una resolución pacífica al problema del Tíbet. Su lucha a favor del Tíbet y la defensa de las garantías individuales y derechos humanos de todos los hombres y pueblos –basada totalmente en la no violencia- le llevó a obtener el Premio Nobel de la Paz en 1989.

Su Santidad ha viajado por más de 62 países en los 5 continentes, en donde se ha reunido con múltiples presidentes, primeros ministros, reyes, príncipes, académicos, líderes espirituales y científicos.

Desde 1959 a la fecha, ha recibido más de 84 doctorados honoris causa, distinciones y premios como reconocimiento a su mensaje de paz, no violencia, comprensión entre religiones, responsabilidad universal y compasión. También es autor de más de 72 libros.

Invitado por Casa Tíbet México, el Dalai Lama visitó nuestro país por primera vez en junio de 1989. En aquella ocasión participó en un foro de Prioridades Globales en la Universidad Autónoma Metropolitana y fue recibido en la residencia oficial de Los Pinos por el entonces presidente, Carlos Salina de Gortari. Conjuntamente con el entonces Cardenal Primado de México, Don Ernesto Corripio Ahumada, y el Consejo Interreligioso de México, participó en el Primer Encuentro Ecuménico y Plegaria por la Paz en la Catedral Metropolitana. Impartió una plática pública en la sala Ollin Yollitzli e inauguró Casa Tíbet México como la primera representación oficial del pueblo tibetano para Latinoamérica.

En el 2004, su visita fue auspiciada por la Asociación Dalai Lama en México, la cual invitó a Su Santidad a impartir un ciclo de enseñanzas budistas en el Teatro Metropólitan y una conferencia en el Auditorio Nacional. Fue recibido por la Cámara de Diputados y el entonces Jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, quien lo nombró visitante distinguido de la Ciudad de México. Fue también galardonado con la medalla de oro conmemorativa de la fundación de la UNAM, de manos del Rector Juan Ramón de la Fuente, y recibió un doctorado honoris causa por parte de la Universidad Iberoamericana. Fue recibido, a nombre del Presidente de la República, por el Secretario de Gobernación Santiago Creel, con quien participó en un evento conmemorativo del Día Internacional de la Tolerancia. Finalmente, una vez más promovió una plegaria ecuménica a favor de la paz conjuntamente con el Arzobispo Primado de México, Norberto Rivera, y el Consejo Interreligioso en la Catedral Metropolitana.

El Dalai Lama se describe a sí mismo como “un simple monje budista”. En sus conferencias y giras mundiales, su sencillez y su naturaleza compasiva conmueven visiblemente a todos los que se reúnen con él. Su mensaje se centra en el amor, la compasión, la responsabilidad universal y, ante todo, en la necesidad de desarrollar un buen corazón.

“Sólo a través de la bondad y el amor puede lograrse la paz interior”: Dalai Lama.

*Texto del Programa de mano realizado por Casa Tíbet México, para la visita de Su Santidad en septiembre de este año.

sábado, 17 de septiembre de 2011

Poema de una madre para cuando una hija se pone triste y está lejos.

                                                    Para Lluvia

Si yo pudiera
construiría un bosque
con árboles esmeralda
           flores rubíes
y estrellas diamantes
que te vistieran de la cabeza a los pies
para que no estuvieras nunca a oscuras.

Si yo pudiera
dejaría caer mi canto
                   cascada tibia
entre tus manos;
       lo haría brotar como ojo de agua
cristalino y fresco
            para apagar tu sed.

Si yo pudiera
sería viento susurrante en tus oídos
trayéndote las buenas nuevas,
                  alas de delicada mariposa
que se posara en tus sienes
para poblar tus sueños
con lotos y discos lunares
                               tres luces
            mantras y sonidos de gong
que te guiaran a casa; tu casa.

Si yo pudiera
borraría tus ojeras
tocaría tu corazón
              ¡Abracadabra!
para abrir las puertas
              de tu sonrisa ancestral.

Si yo pudiera
ahora mismo correría
a tomarte entre mis brazos,
a fundir tu congoja
en el oleaje de las dulces agua
del amor de ésta, tu madre.

Y puedo ser ¡Albricias!
                          -ahora mismo-
               eco del eco milenario
que corre por cada esquina del viento
        la sombra de este sol
que a diario pone su empeño
para abrirse paso entre las nubes
             y enviarte el ritmo tibio
                          acompasado vuelo
de este mi corazón
                   para envolverte
                    y arrullarte a la distancia.

lunes, 5 de septiembre de 2011

Soy y no soy

http://www.flickr.com/photos/sidarthababii/with/5961820321/

Soy y no soy la mujer que aligeró tu espíritu
          Soy y no soy la mujer que devoró tu serenidad
 
Soy y no soy la mujer que te sacó de un cómodo infierno
para arrojarte cuatro pisos por debajo al más terrible sitio
helado y solitario.

Soy y no soy
        la carga que te tumba.
las alas que te elevan.
Soy y no soy el animal que agoniza
el que vislumbras en la penumbra
de tus ideas.

Soy y no soy el animal a punto de echar a andar
su lastimado cuerpo
            para llevarte a trote
sobre este pecho herido sangrante.

Soy y no soy la mujer que te ama
y te acompaña y no
por este paisaje yermo
      viaje agotador
                   extenuante.
                            
Soy y no soy
la mujer que te escucha
la que va contigo de la mano
en este florido campo
             luminoso
                   animando tu aliento.
 
Soy y no soy esa voz que te arrulla
         que chirría en tu cerebro
que consume tus sueños
            la que los alimenta y nutre.

Soy y no soy la puta
la santa
la madre
la hija
la hermana
la amiga.

Soy,  una hoja más en este árbol frondoso
                  una hormiga en este gran hormiguero
una abeja obrera en el panal
                                            una gota de mar
          que evita que éste se reseque
y como tú, también desea ser feliz
                                        aunque no sepa cómo…
Soy y no soy
                    tu reflejo.

viernes, 2 de septiembre de 2011

Al filo de mi vida

http://www.flickr.com/photos/ladyorlando/sets/72157600540792380/?page=4

Cuando los días caigan
          deshojados
del árbol de mi vida
    este otoño
          lágrimas desgranadas
viento que ulula y gira en la ventana
encrespando mis sueños…

Cuando se seque el agua
antes de ser nube
y quede suspendida la lluvia
    remolino en el viento
tomaré tu mano y dejaré mi canto
en tu mirada;
ahí donde descansa el día
y la tarde se puebla de pájaros
           y racimos de nubes.

Ya no tendré más miedo
de caminar al filo de mi vida

Seré espuma de mar
polvo del polvo
del breve instante
de este mi paso
que deja huellas
borradas por las olas
del mar de seres
que van y vienen
                  vienen y van.